Vino caliente y salchicha, tradiciones de los mercados de Navidad
El vino caliente y las salchichas son dos elementos que no fallan en los veritables mercados de Navidad del centro de Europa. Y es que en casi todos los mercados, entre las diferentes paradas de objetos y productos típicos de la Navidad abundan también las paradas de comida.En Alemania, las paradas más típicas para comer en medio de los mercados son las de salchichas. En ellas, en general se pueden encontrar los bradwurst, servidos con un trozo de pan y que se complementan con las salsas de kétchup y mostaza que las mismas paradas tienen en sus mostrados y con los que se sirve el mismo cliente. Pero también hay otras variedades y para los que les gusta más el picante, en las paradas encontrará los currywurst. Con una salsa curry, muchas veces son servidos ya cortados y en un pequeño bol sumergidos en esta salsa picante.
Pero las salchichas no son el único producto que comer en un mercado navideño alemán. En ellos también abundan las paradas en las que allí mismo se puede tomar una crep, ya sea dulce -la de nutella nunca falla- o salada y también las de pizzas y otras comidas rápidas.
Y para acompañar estas comidas, nada mejor que un buen vino caliente. El vino caliente o el glühwein (en alemán) es la bebida típica de los mercados de Navidad del centro de Europa, en especial de Alemania. En estos mercados son muchas las paradas que tienen sus artimañas para calentar el vino que después sirven a los clientes.
El precio de una taza de vino caliente es de unos 2,5 o 3 euros, aunque como siempre depende del mercado, la parada y la calidad del vino. En muchos mercados, para asegurar que el cliente no se queda con la taza o la deja en cualquier parte también obligan a pagar una fianza que se recupera cuando está es devuelta a la parada.
El vino caliente típico se elabora con vino tinto pero también hay muchas paradas que ofrecen vino blanco caliente para hacer pasar el frío en los preciosos mercadillos de navidad germánicos. Este vino también se toma en muchas zonas de montaña.
Este vino, en cierta manera se podría comparar la sangría -aunque esta se toma muy fría- ya que al vino de invierno se le añaden diferentes frutas y especies así como también mucho azúcar para hacerlo más dulce.
Aunque los mercados de Navidad son al aire libre, la mayoría de ellos cuentan con diferentes espacios cubiertos con mesas en las que comer o tomar el vino de pié protegido del frío y la posible lluvia.